Camino a los Oscars: Darkest Hour

Darkest hour – en español “Las horas más oscuras” – es la nueva apuesta de Joe Wright, director de películas como Orgullo y prejuicio (2005) o Anna Karenina (2012).

El momento histórico que relata esta película (la llegada de Winston Churchill al cargo de Primer Ministro en medio de la Segunda Guerra Mundial, y las decisiones de éste que afectaron el curso de la contienda bélica) se ha replicado hasta el cansancio en otros filmes, con enfoques muy similares entre sí. Sin embargo, lo que vuelve excepcional a esta versión son sus actuaciones, y el énfasis que puso el director en la figura del Primer Ministro y el círculo íntimo que lo rodeaba. Con una caracterización que lo vuelve irreconocible (para la cual debió someterse a largas sesiones de maquillaje), Gary Oldman nos regala un Winston Churchill apasionado y decidido, tal como la historia lo retrata. Esta brillante interpretación -en la que el actor logró imitar y transmitir el espíritu que Churchill mostraba en sus discursos- lo llevó a obtener premios como el Golden Globe, el SAG y el Critics’ Choice Award; y todo parece indicar que también pondrá el codiciado Oscar en sus manos.

Dos mujeres importantes en la vida del primer ministro también tienen un lugar destacado en la película: Clementine Churchill, su esposa (interpretada por Kristin Scott Thomas) y Elizabeth Layton, su secretaria (encarnada por Lily James). Gracias al buen trabajo de estas dos actrices, sus papeles no pasan desapercibidos, y ambas figuras son retratadas como grandes pilares que ayudaron a Churchill a mantener la entereza en los momentos difíciles, en “las horas más oscuras”.

Sin dudas, se trata de un trabajo excepcional, que nos acerca desde un ángulo más personal y profundo a la figura de uno de los políticos más recordados por la historia del siglo pasado.